Desde mi metro cuadrado creo fuertemente que los seres humanos somos una mezcla entre la realidad y lo que queremos que pase, aunque no siempre activemos el modo Hacemos Cargo de eso que queremos que nos pase, pues si de algo estoy suficientemente segura es que no siempre nuestra voluntad y nuestras ganas están en modo ON, es decir encendidas.
Nuestro universo individual no es físico sino mental: debemos crear, crecer y darle sentido a lo que queremos y para ejercer eso necesitamos ingredientes Psicopoderosos como la voluntad, las ganas, la acción y varias pizcas de paciencia, pues hay “deseos” que precisamos darle su espacio y su tiempo para que acontezcan.
Crees en la frase, querer es poder??
Yo creo en querer más hacer es igual a poder, pues si pensamos a detalles, cuantas cosas deseamos y queremos pero no se nos dan, precisan del “HACER” para que acontezcan. El querer es pensamiento, el hacer implica acción y el poder por ende es la mejor manifestación entre la fusión del pensamiento y la acción. Por ende poderoso es –para mí– el que logra ejecutar un pensamiento, el que logra cumplirse un deseo.
Si consideramos eso y lo utilizamos como un recurso, o como una estrategia de gestión, quizás le sacaríamos un mejor provecho a nuestros momentos, incluso a aquellos que nos toca improvisar, el momento más oportuno es aquel que se improvisa, el que se genera a partir de saber utilizar nuestra espontaneidad, o bien, el animarnos a utilizarla.
Lo espontáneo es un recurso muy valioso cuando nos animamos a ejercerla, y para gestionar los momentos, es imprescindible que le tengamos de aliada estratégica, así como a la emblemática suerte, pues desde mi sentir, la suerte es más cuestión de saber dónde están las oportunidades.
Entonces… Entre tu querer, tu hacer y tu poder, donde están tus oportunidades, esa que podrías improvisar??
Creo y comparo, que parte de nuestro recorrido de desarrollo personal es saber pararnos en esa inmensidad que queda invariablemente por fuera de las expectativas, y gestionar los momentos, seguir haciéndonos historias. Como escribís la tuya!
Atentamente